La artista plástica Gloria Martín, quien fue miembro de la cuarta promoción de jóvenes creadores de la Fundación Antonio Gala, expone Aula río en la galería Birimbao de Sevilla (C/ Alcázares, 5). En la que es su quinta exposición individual, la artista continúa posicionando la propia pintura como centro narrativo de su trabajo, esta vez reflexionando sobre su aspecto didáctico. Podríamos decir que se trata de una exposición de final de curso, ya que el cuerpo de trabajo que aquí se muestra ha sido concebido y elaborado durante el presente curso académico, compaginando el trabajo como profesora en la Escuela de Arte de Sevilla con la actividad creativa del estudio. En este Aula río a veces no se distingue una faceta de la otra, ambas fluyen y avanzan hacia no se sabe muy bien dónde.
Las obras que componen la muestra se articulan alrededor de la idea de bodegón como puesta en escena de los elementos que componen el paisaje cotidiano de la pintora en su rol como docente. Imágenes que por uno u otro motivo la atraviesan y que traduce a su particular lenguaje pictórico: pizarras, caballetes, viejas diapositivas quemadas por el tiempo, antiguo mobiliario académico, cuadernos del alumnado… El poder simbólico de estos objetos se acompaña de una serie de trabajos que ahondan en la representación de la propia pintura mediante la idea de la imagen proyectada, una visión recurrente durante las clases teóricas que la artista imparte y que sirve de pretexto para hacer un homenaje a uno de sus cuadros favoritos: “El estudio rosa” de Matisse. Este Aula río es un pasadizo entre la clase y el estudio, un espacio intermedio que conecta los dos mundos.
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